martes, 14 de abril de 2009

Mar de Ruidos

Veo tu rostro en un eje rodante.
Gracias a un eco creo saber que viene a continuación.
¿Ya cuantas veces han salido esos vientos de ti?

Aun sabiendo que cercenas mi piel, volteas el rostro.
No es fructífero seguir esos pasos.
Pues los días más tristes no vienen sin ti.

Aun te tengo dentro, pero es difícil querer tenerte ahí.
Pues los kilos que jalan la balanza del lado contrario, me hacen sentir que el contrario soy yo.
Sintiendo la extraña soledad ausente, no puedo dejar de pensar en mí.
Pues como podría salvarte si aun no se lo que es salvarme a mi mismo.

Estoy cansado de vivir con una pared frente a mí.
Y aun más de no saber porque seguir.
Ecos, ya no los quiero dejar atrás, pues no es normal vivir entre ellos.

El pasado no puede volver, debemos comprenderlo.
Y el futuro no nos va a juntar.

Veo tu rostro. Y no lo quiero ver.